También a mí me afecta esa enfermedad y curiosamente creo que una leche en polvo de la que normalmente toman los niños lactantes ha sido el único producto que, sin llegar a curarme, ha hecho que los dolores que teníoa principalmente en las manos hayan desaparecido. Tampoco he vuelto a ytener las sensaciones de anquilosamiento que tenía principalmente durante la noche.
Supongo que algunos de los componentes que posee produzcan una regeneración de los tejidos dañados. Tampoco puedo afirmar que a todos les sea así de eficaz, pero nada se pierde por probar, porque tampoco es nada nocivo ni que produzca ningún trastorno. Sí me agradaría conocer los resultados experimentados por aquellos que lo prueben. Yo tomaba una o dos tacitas al día.
http://es.geocities.com/el_exilio_y_la_deportacion
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