Javier Riba dijo:
...la actualidad de los enunciados técnicos de su Escuela de Guitarra 1825 que la hacen más importante que su Nuevo metodo 1843
Amigo Javier,
Voy a centrarme en esta ocasión en uno de los puntos que tú consideras de los más interesantes en el libro de Pompeyo Pérez, la valoración de la
Escuela de Guitarra (1825) frente al
Nuevo metodo para guitarra (1843).
El libro de Pompeyo tiene un problema que por desgracia comparten otros libros publicados recientemente: la falta de un índice onomástico. De este modo, para consultar algo en el libro hay que buscar cada vez en cientos de páginas. De todos modos, creo haber localizado el lugar donde Pompeyo Pérez compara los dos métodos de Aguado antes mencionados.
En la p. 265, escribe Pompeyo Pérez (la cita en azul):
5)
...el Nuevo Método para Guitarra constituye la culminación del proceso de evolución técnica que el guitarrista experimentó a raíz de la invención del trípode, y como tal hemos de considerarlo el más representativo de su escuela desde el punto de vista global. Sin embargo, desde nuestra perspectiva actual es la Escuela de Guitarra, con la sorprendente modernidad de sus postulados y la audacia de algunas de sus propuestas -de sobra comentadas-, la obra más significativa de cuantas escribió Aguado...
Entre esas propuestas audaces que Aguado formularía en su
Escuela de Guitarra, pero que, según Pompeyo Pérez, atempera en el método de 1843, estaría el uso del meñique de la mano derecha para pulsar las cuerdas. En la p. 168 de su libro, comentando la
Escuela de guitarra publicada por Aguado en 1825, Pompeyo Pérez escribe:
Un último aspecto a destacar dentro de estos primeros capítulos es el que aparece definido en este enunciado: Todos los dedos de la derecha servirán a la pulsación, bien que rara vez el pequeño.
Este concepto, que contempla la utilización del dedo meñique para la pulsación de las cuerdas, resulta absolutamente revolucionario en una época en la que la mayoría de intérpretes de los que Aguado podía tener noticia ni siquiera utilizaban el anular con convicción. Incluso hoy en día todavía se considera como una extravagancia la posibilidad de utilizar el meñique,...
Parece que Pompeyo Pérez piensa que Aguado propugnó la utilización del meñique de la mano derecha al principio de su carrera, pero que a partir del uso de la trípode y de su contacto con Sor, su opinión al respecto varía, disminuyendo la utilización de los dedos anular y meñique de la mano derecha para la pulsación.
Lo primero que quiero comentar es que en la última etapa de su vida, Aguado continúa recomendando la utilización del meñique de la mano derecha, como se deduce de la digitación del maestro para el estudio número 8 (compás 3) de su
Nuevo Método (p. 126 del facsímil de Chanterelle) o como leemos en el
Apéndice al Nuevo Método para Guitarra, de 1849 (se publicó en 1850).
Por otro lado, el meñique de la mano derecha se utilizó en la pulsación antes, durante y después de Aguado. En España, antes de 1825 (fecha de publicación de la
Escuela de Aguado) hay al menos dos autores que lo recomiendan, de uno de ellos sólo conocemos las iniciales que figuran en la portada de su método de 1819: J. M. G. y E. El otro es Tomás Lardies, quien publicó un método en 1818. Es casi seguro que Aguado sí tuvo noticias de estos métodos. Fuera de España, Francesco Alberti ya habla de pulsar con el meñique en 1786. Desde entonces son numerosos los autores que utilizaron así el meñique, como José Jesús Pérez (en su método de 1843-44), Jaime Ruet (en su método de 1861), William Foden (1860-1947), Domingo Prat (1886-1944), Heitor Villa-Lobos,... por no hablar de los intérpretes y pedagogos de hoy en día, como Stepan Rák, Kazuhito Yamashita, Charles Postlewate,...
Curiosamente, a pesar de que Pompeyo Pérez analiza uno a uno los métodos de Aguado, no señala algunos de sus postulados que, en mi opinión, son más "revolucionarios" que el uso del meñique de la mano derecha, como sus experimentos con guitarras de doble tapa, con distintas ubicaciones del puente o el sorprendente cambio de colocación de la mano izquierda que explica Aguado en su
Apéndice, de 1849, recomendando la colocación "violinística" que hoy algunos autores llaman "mano sentada", frente a la "mano de pie" con los dedos perpendiculares a las cuerdas.
Si os apetece comento más errores en el libro de Pompeyo. Vosotros diréis.