Hola, resorte. A una de las últimas guitarras que he hecho, de palo santo, en contra de mi costumbre (no suelo hacerlo desde hace años) le he dado tapaporos nitro, de la marca Titán, y ha quedado preciosa.
Ahora bien, al principio me pasó lo mismo que a ti, al pasar la muñequilla, ésta no dejaba goma laca sobre el fondo, sino que pasaba sobre él sin mojarlo, como si la muñequilla no tuviera barniz, como si estuviera seca. ¿Qué hacer?
Desde luego, lijar. Mientras lijaba comprobé, como era de esperar, que el tapaporos estaba introducido en los poros del palo santo. Entonces pensé que el propio nombre del producto, tapaporos, me estaba dando la solución. Si eliminaba todo el producto que estaba sobre la madera, dejando únicamente el que estaba dentro del poro, seguro que la goma laca sí mojaba sobre la madera recién lijada.
Efectivamente, lijé con 320 hasta eleminar todo el tapaporos, quedando sólo el de los poros; a continuación comencé a pasar la muñequilla con la goma laca, y... ¡perfecto! el fondo comenzó a tomar un brillo impresionante.
Así que mi consejo es que la lijes con lija fina, y asunto solucionado. Si la capa de tapaporos es muy gorda, pásale antes una un poco más basta, 280, por ejemplo, y después la fina. El caso es quitarle todo el taporos, excepto el del poro. Si el poro no ha quedado bien cubierto, más tapaporos y más lija.
Desde luego también se puede tapar el poro sólo con goma laca y el resultado es el mismo, aunque el proceso es mucho más lento.
En la tapa no es necesario, puesto que tanto el abeto como el cedro rojo carecen, prácticamente, de poros.
Pero no olvidemos que estamos hablando de estética y no de acústica, porque si hablamos de ésta última, hay guitarreros, como Romanillos, que no son partidarios del tapaporos, por considerarlo perjudicial para el sonido.
Espero que todo este rollo te sirva de algo, resorte.