7ª SEMANA DE LA GUITARRA de CARTAGENA. 17 al 23 de abril de 2006

Magnífico festival, y estupendo reportaje gráfico.
Tengo pendiente varias crónicas sobre actos del mismo. Le prometí a mi amigo Pedro Jesús una sobre su estupenda charla, y aunque algo tarde, (perdón), ahí va:

El pasado día 22 de Abril del 2006, dentro del marco de la 7ª Semana de la Guitarra de Cartagena, tuvo lugar a cargo de Pedro Jesús Gómez una ilustrativa charla sobre los instrumentos de cuerda pulsada anteriores a la guitarra clásica. El músico manchego, que había actuado la noche anterior junto al ensemble de música antigua La Reverencia en un concierto con música española, alemana e italiana de los siglos XVII y XVIII, fue comentando las peculiaridades de cada uno de los instrumentos de su amplia colección, e interpretando a la sazón apropiados ejemplos musicales en todos ellos, a saber: 'Ud, cítola medieval, vihuela de mano, guitarra barroca, tiorba y laúd barroco. El luthier Asier de Benito tuvo la gentileza de cederle una vihuela que se encontraba en ese momento en la exposición de lutería. Este experimentado guitarrista continuó con su labor divulgativa sobre los instrumentos de cuerda pulsada el día 10 de Mayo en la charla-concierto que bajo el título de "La vihuela:¿un instrumento del pasado?" presentó en la Sociedad de la Vihuela en el Conservatorio de Arturo Soria Madrid, y donde interpretó versiones comparativas de obras para vihuela en su instrumento original y sus transcripciones a la guitarra clásica. Más recientemente, el 12 de Agosto en la localidad de Hinjosas de Calatrava, y en el marco del festival de guitarra del mismo nombre, Pedro Jesús nos ilustró sobre la Chacona, sus orígenes y su presencia en el repertorio guitarrístico.

Pero volvamos a su charla en Cartagena: Comenzó presentando un Ud árabe, de 4 órdenes, procedente de egipto, aunque explicó que los hay de hasta 7 órdenes simples y dobles. Describió las dos afinaciones más habituales, persa y árabe, (por segundas o cuartas), y la expresividad que alcanza su diapasón sin trastes. Describió aspectos esenciales de la técnica del plectro para este instrumento e interpretó la Cantiga de Santa María nº 100: Santa Maria, strela do día.

21.JPG


Esta música, que según refleja la iconografía de las propias Cantigas se interpretaba habitualmente en la Capilla de Alfonso X con músicos e instrumentos procedentes de oriente y de occidente, le dió pie a presentar una gran cítola construida por Sergi Martí, precioso monoxilo de nogal encordado con 4 órdenes dobles de acero, afinados según el uso francés, más probable en Compostela, con intervalos de 2ª y quinta. Pudimos escuchar del Llibre Vermell de Montserrat su versión instrumental de Cunti simus. Observamos la original posición vertical del instrumento con respecto al cuerpo, documentada por la iconografía de la época, y una tecnica de plectro diferente que la utilizada para tocar el 'Ud.

Para comezar con los repertorios propiamente instrumentales del renacimiento, utilizó la vihuela de mano, usando un instrumento construído por Asier de Benito y con scordatura en sol. Comentó el uso de los trastes móviles que permiten la afinación en diferentes temperamentos históricos, así como los tipos de repertorio y los usos de la vihuela enla España imperial. Respondió a preguntas del público referentes a las alturas relativas del La para según qué repertorio, y mostró una lucida improvisación sobre el tenor de la romanesca.


Los aproximadamente 150 años de extensión histórica del periodo barroco en música, le dieron para mostrar 3 instrumentos. Comenzó con una guitarra barroca inspirada en los modelos de la familia francesa Voboam, encordada según la afinación francesa, con dos cuerdas agudas en el quinto orden y una grave y una aguda en el cuarto, y construída por Carlos González en Córdoba. Señaló las peculiaridades del lenguaje rasgueado y de campanelas en este instrumento e interpretó unos villanos del mallorquín Francisco Guerau.

Finalizó esta amena comunicación divulgativa tocando dos de los grandes laúdes del barroco, una tiorba o chitarrone y un laúd barroco. Con la primera, construída por Carlos González en París, puso ejemplos del funcionamiento de la afinación re-entrante característica de estos instrumentos e interpretó una intabulación propia de un Preludio en la menor de Robert de Visée, absolutamente emocionante. La presencia del laúd barroco de 14 órdenes construído por Jacob Van de Geest y reformado por José Miguel Moreno, impresionó a los numerosos asistentes por la sonoridad de este magnífico instrumento, del que sonaron las notas del Passacaglia en sol menor de H.I.V. Biber.
 
Atrás
Arriba