Goma-laca "negra" de elaboración artesanal

[Restaurador]

Hola todos:
Durante estas últimas semanas me he entretenido revisando con calma el contenido de esta Sección de Barnizado del Foro.
A lo largo de las 11 páginas de las que consta la Sección hasta ahora, existen referencias y preguntas en torno a la "goma-laca negra" y su posible preparación artesana, sin que las escasas respuestas y contribuciones de los foreros hayan resultado clarificadoras para poder sacar conclusiones que nos sean de utilidad.
No ocurre lo mismo cuando buscamos información sobre la preparación y el uso de otras lacas de color, donde las intervenciones de destacados foreros como Arturo Garés, Defran, Cajoge, Jonyguitar, Markus y otros han resultado esenciales para esclarecer aquellas dudas que podíamos tener sobre el uso de tintes, anilinas al agua, al acohol y otros productos.
En otra ocasión, creo que por motivo de una tapa que se quería lacar en negro, yo mismo aporté información sobre una laca comercial de gran calidad y elevado precio en el mercado, cuyos resultados parecían buenos. Creo que fue en un hilo de la segunda página de la Sección:

http://guitarra.artepulsado.com/foro...oma-laca-negra

Sin embargo, nada se ha dicho hasta ahora sobre "laca negra" de elaboración artesana.

Los antiguos barnices negros para instrumentos (1750 a 1890) que eran usados, entre otros motivos, para cubrir el dorso de los mástiles de algunos instrumentos de cuerda, se basaban siempre en la inclusión del "negro de humo" (a diferentes concentraciones) en la formulación del barniz elegido para el instrumento en cuestión. Con dicho barniz, lo normal era que se tuvieran que dar varias manos (casi siempre demasiadas) para conseguir una buena cobertura de la madera. Era un proceso engorroso y sucio que exigía el uso de guantes (entonces no demasiado finos), cuidados especiales para no embarrar el resto del instrumento y que, además, con el paso del tiempo, cuando el producto aplicado perdía estabilidad y se degradaba, solía acabar también manchando las manos de los artistas que los tañían (Tratado de Barnices y Charoles, Fco. Vicente Orellana 1755, Manual de Barnices, Juan Oliveres 1847, Manual de Barnices y charoles, Jules Rossignon 1869)

Tras la revolución industrial los artesanos pudieron disponer del "negro de anilina" en sus versiones líquida y en polvo, con sus variedades solubles en agua o en alcohol. Ello proporcionó unos preparados más eficaces en cuanto a cobertura y más estables en el tiempo, pero con formulaciones de elaboración más complicada, como ésta que nos aporta J.G. News en su Manual de Barnices de 1906, que presento aquí calculada para la cantidad de 1 litro de Alcohol de 90º:

Alcohol etílico de 90º............1 litro
Goma-laca..........................120 gr
Negro de anilina...................80 "

Para su preparación, primero se disuelve la goma laca en el alcohol. Luego se disuelve el negro de anilina en una mezcla de ácido clorhídrico concentrado y alcohol (en proporción de 4 por 1 y en cantidad suficiente), removiendo la mezcla hasta conseguir una masa homogénea y fluida que se agrega a la solución de goma-laca ya preparada. Una vez diluida esta masa y obtenida la mezcla final, ésta se filtra a través de una doble tela para eliminar los posibles grumos, por pequeños que éstos fueran, guardando después el producto en un frasco de cristal oscuro, debidamente etiquetado.

La técnica de aplicación varía poco de la acostumbrada con otras lacas: 2 manos a brocha de pelo corto, dejar secar, lijar y continuar con muñequilla. Eso sí, son imprescindibles el uso de guantes y las medidas de protección del resto del instrumento para no causar en el mismo manchas de difícil solución. En cuanto al resultado, tuve ocasión de comprobarlo al hacer uso de este preparado hace unos años en los mástiles de 2 guitarras románticas alemanas de las que se hacían a principios del S. XX y he de decir que quedaron muy bien, aunque al principio daba la impresión de que tras las primeras pasadas las maderas, que parecían ser de peral, iban a quedar de un tono azul oscuro.

Si alguien quiere probarlo, ahí quedan la fórmula y el modo de preparación, pero tengo que decir que actualmente la obtención de este barniz responde más a un motivo de curiosidad que de necesidad, ya que hoy, con los avances logrados en los modernos materiales de fotoimpresión, resulta mucho más sencillo y menos peligroso obtener una goma-laca "negra" de calidad de una manera mucho menos complicada y más barata.

Pero ese nuevo método de obtener el barniz será motivo de un nuevo "post", si os portáis bien y hay más participación activa en el Foro.

Saludos a todos

[weiss]

Muchas gracias restaurador!

La verdad es que ando detrás de una solución para el barnizado en negro desde hace bastante tiempo.

La solución que había encontrado (y que he aplicado ya en dos instrumentos) es parecida.
Hace un año o dos, a través de una conversación epistolar (mas bien "emailar") con Van Edwards (un luthier inglés, autor de un cursillo para construir laudes) me confirmó que iba por el camino correcto (la conversación versó sobre el mismo tratamiento para puentes de laúdes, que suelen ser de peral):

- Con tinta china (de las que vienen ya mezcladas con gomalaca), se dan unas capas sobre la madera.
- A continuación, para fijar el color y que se desgaste menos con el uso, se puede dar varias capas de goma laca (de la transparente normal).

A ver, este método funciona, y basta lijar con lana 0000 para que el acabado sea mate. terminará brillando con el uso y el desgaste.

Otra opción que también he probado es mezclar goma laca con la tinta china: esta tiene gran capacidad para oscurecer la goma laca, y también sirve.

En mi opinión, creo que es mejor dar las capas oscuras primero.. y dejar de darlas lo antes posible, puesto que cuanto mas trabajes con color negro, mas probable es que se te termine colando alguna manchita en alguna parte.

En muchos instrumentos antiguos con mucho uso, se llegan a ver las señales de desgaste, en las que aparece por debajo la madera..

Una opción muy buena para aplicar como primera capa y minimizar este "efecto" es la de "ebonizar" primero la madera.. limadura de hierro metida en zumo de limón (o acido acético, que lo venden en Riesgo) y se pinta la madera.

He comprobado que el ebonizado es capaz de introducirse 1mm aproximadamente, incluso en maderas poco porosas o incluso resinosas, por lo que así aseguras que la madera va a estar oscura debajo del barniz.


Muchas gracias por la aportación Restaurador, un abrazo y ¡felices fiestas!

[Restaurador]

Hola weiss:
La verdad es que desconfiaba ya de que alguien sintiera curiosidad por este tema y participara en el hilo. Por ello no había seguido aportando nuevos datos, ya que si el tema no suscita interés ¿para qué seguir con el mismo? Por ello agradezco doblemente tu interés al responder en el foro, pues ello me induce a pensar que no ha caído en saco roto lo que aporté hace ya más de 3 meses. Así pues, he decidido que te mereces un premio que consiste en añadir un nuevo método para conseguir una laca negra fácil de preparar, estable y fiable.
En el campo de la investigación, aunque ésta sea de rango humilde y pobre en recursos, no basta sólo con tener inquietudes; también es necesario tener ideas, pues son precisamente éstas las que, muy "de vez en cuando", nos aportan soluciones. En este caso la solución ha sido muy sencilla, ya que la idea nos la ha proporcionado la propia evolución de la tecnología y sus nuevos productos, entre ellos los nuevos materiales de foto-impresión. En base a ello, aporto la nueva formulación de un producto, con algunos detalles que condicionan sus buenos resultados, calculada para una cantidad de medio litro de alcohol etílico de 96º, ya que con el producto resultante hay suficiente para cubrir mucha madera.

Alcohol etílico de 96º......................................500 ml
Laca descerada......................................... ......60 gr
Tóner de impresora......................................... 50 gr

Preparación:
- Se mezcla la laca con el alcohol y se deja reposar, removiendo el frasco de vez en cuando hasta alcanzar su dilución total (unos 3 días).
- Se calienta la mezcla al baño de María (45-50º) y una vez alcanzada la temperatura ideal se va añadiendo poco a poco el tóner, removiendo la mezcla con un palito entre 15 y 20 minutos.
- Se filtra luego el producto, en caliente, a través de una capa de tela de camiseta, con el fin de eliminar los posibles grumos provocados por restos de laca sin disolver.
- Finalmente, el producto obtenido se almacena en un frasco de cristal oscuro y convenientemente etiquetado.

Para la fase del baño de María no es necesaria ninguna fuente de calor local como hornillos eléctricos ni mecheros de alcohol o de gas, bastando para ello con poner la mezcla en un matraz de base ancha y paredes finas sumergido en una palangana llena de agua caliente, cuya temperatura miraremos de mantener con la aportación repetida de nuevas cantidades de agua a una temperatura algo superior. De esa manera evitaremos los peligros derivados de la posible combustión espontánea de la mezcla y de indeseables explosiones, siempre violentas e incontrolables.

Técnica de barnizado:
Cuando vayamos a aplicar el producto, una vez preparadas las maderas, conviene calentar una pequeña cantidad del mismo para su aplicación "a brocha o pincel" y dejar secar después durante 48 horas. Luego, tras un primer lijado de las superficies barnizadas, ya podemos seguir con el trabajo "a muñequilla" a la manera habitual, con el producto "en frío". Eso sí, no olvidar proteger con hojas de periódico la superficie de la mesa de trabajo y usar guantes impermeables para proteger nuestras manos (especialmente las comisuras y los espacios bajo las uñas), así como tomar las debidas precauciones para no manchar las zonas "no lacables" del instrumento, nuestras propias ropas y las zonas vecinas al área de trabajo, pues no hay por qué ser "gorrinos" en este menester.
Los resultados son buenos, duraderos y además las zonas barnizadas con este producto no manchan ni tiñen las manos ni las ropas y aguantan perfectamente la humedad.
Saludos a todos