Hola Alexios:
Lo que refieres no es nuevo. Los guitarreros antiguos españoles ya solían guardar el polvo resultante del lijado de algunas maderas para tapar poros y para cubrir defectos de superficie de las mismas, sobre todo los fallos y pequeños huecos que quedan en éstas cuando se hacen incrustaciones de marquetería. Por ello el polvo de madera es de gran utilidad en los trabajos de restauración. Como ejemplo, te muestro unas imágenes de una estantería de mi taller.
Lo que ya no estoy tan seguro, después de haber visto el vídeo, es de que al lutier del reportaje le sea de gran utilidad para tapar poros el polvo procedente de un lijado de madera con lija de grano 80, como parece ser la que calza la máquina lijadora que nos muestra, ya que yo tengo entendido que el polvo útil para tales menesteres se consigue con lijas de grano mucho más pequeño, es decir de 360 en adelante.
Saludos.
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