Hola todos:
He seguido con toda atención las intervenciones habidas hasta ahora en este hilo cuyo desarrollo considero muy interesante a pesar de que, a juzgar por lo que dice Francisco en su última intervención, no le haya sido de gran utilidad todo lo que aquí se ha dicho.
Creo (y si no es así, que Francisco me corrija) que aunque su pregunta inicial era de carácter técnico-práctico, sin embargo las respuestas han derivado poco a poco al terreno puramente teórico. Digo esto porque en el segundo párrafo del mismo post Francisco aclara muy bien cuál es la cuestión para la que busca respuesta y que yo interpreto así: Si hay alguna manera, alguna técnica, algún proceder especial o algún truco que nos pueda proporcionar un resultado estable en el abombamiento de la tapa de acuerdo a la curvatura con el radio previamente elegido.
Pues bien, he de decirle que sí, que hay varias técnicas ya ensayadas por diversos guitarreros con gran experiencia y que, si no del todo, han conseguido acercarse bastante a ese “resultado ideal” que él persigue y que a todos nos gustaría conseguir. Estas técnicas, en orden de complicación y dificultad progresiva, serían las siguientes:
La primera: Seguir un correcto orden en el proceso de varetaje, encolando las varetas de forma simétrica desde el centro a la periferia y dejando para el final las oblicuas inferiores cuando el “varetaje tipo” elegido las incluye en su esquema.
La segunda: Aumentar la participación de un elemento estructural más robusto en la rigidez de la curva, como es en su caso la barra armónica inferior, bien sea bajando un poco su ubicación, bien añadiéndole un brazo divergente en la zona de agudos o también dándole a la barra una orientación atípica (diagonal). Un buen ejemplo de esta solución podría ser lo que yo hice en la guitarra “Gabriela” hace un año y medio (puede consultarse en la Sección "Las guitarras que construimos" de este mismo Foro).
La tercera técnica: Mantener el abombado completo de la tapa durante todo el proceso de encolado de las varetas. Esto se consigue sujetando primero las varetas a presión en su lugar antes de encolarlas mediante la fuerza de las tijas tensoras y encolarlas a continuación una por una, siguiendo su orden, mientras el resto se mantienen a tensión.
La cuarta técnica (más que técnica es un truco): Hacer participar una fuerza tensora transversal a partir de las bandas de la tapa mediante una “barra flotante bajo-puente” con o sin apoyo en la línea media.
Y la quinta y última (que yo conozca): Es la de usar varetas previamente domadas y consiste en afinar bien las varetas y conformarlas con el domador hasta la curvatura más aproximada que cada una de ellas debe alcanzar (partiendo de la central con valor de curva de radio 6.000 y aumentando el radio progresivamente en las siguientes hasta la más marginal), todo ello antes de encolarlas, ya que las varetas no domadas previamente también tienden a rectificar su curvatura después de forzar su posición inicial, una vez retiradas las tijas, contribuyendo con ello a la pérdida o merma del abombado final. Esta última solución, por supuesto, es la más complicada.
Saludos a todos