¿Escuelas de Música?

Maribel Alcolea

Moderadora
Me gustaría explicar que se siente cuando decides dedicarte a la enseñanza de la Guitarra, y te encuentras la situación tan compleja de trabajar en los Conservatorios, a veces por las pocas plazas que ofertan, otras….porque están tan lejos de tu ambiente, que has de decidir entre familia o trabajo, e indudablemente decides familia.

Un día decides crear, lo que tanto deseas cerca de ti, y trabajas durante muchos años, con un gran éxito, luchando contra todas las tormentas que se avecinan que son muchas…Creas la obra…y has de dejarla caer.

En mi pensamiento, quedan estás preguntas que os lanzo a todos vosotros:


- ¿Por qué los músicos que trabajamos en Escuelas de Música, tenemos esta situación tan precaria?
- ¿Por qué nadie valora nuestro trabajo?
- ¿Por qué lo consideran como un juego de niños?
- ¿Por qué somos uno de los cuerpos de profesores más numerosos, y nadie se preocupa por nosotros, ni sindicatos, ni gobierno…no hay una legislación que regule nuestro trabajo?
- Nos pagan lo que quieren, cuando quieren, nos despiden cuando les place…..¡¡Hasta cuando va a durar esto!!
…y cuándo seremos capaces de dejar de tocar…., y preocuparnos un poco de que están abusando de nosotros, de asociarnos, y hacernos notar y oír…porque estoy segura, que muchos estamos padeciendo estos problemas en silencio, y no digas nada o perderás….TODO


Un Saludo, espero vuestras respuestas
 
Re: Del bien al mal...

MARIBEL
No puedo responder tus preguntas por que desconosco la situacion en españa, pero si puedo decirte que en mexico la cosa esta peor, para mucha gente (sobre todo en provincia) ser musico equivale a ser un fracasado, una persona que no supo estudiar una `verdadera profecion` como doctor, ingeniero etc.
La gran mayoria de los musicos de conservatorio, para sobrevivir, tienen que trabajar en grupos populares -bodas,cumpeaños o las fiestas populares de los pueblos- . El apoyo a la cultura es muy poco y aun asi los que amamos la musica y en especial la guitarra, no nos damos por vencidos y buscamos los medios para seguir en los que nos apaciona.
En mi caso personal, me canse de buscar apoyo oficial, y desidi poner mi trabajo (un metodo de guitarra clasica), en la red, y no vivo de la musica -como yo quisiera- tengo un pequeño negocio y en mi tiempo libre lo dedico a ampliar mas mi metodo y a componer pequeñas obras.
Te mando desde mexico un cariñoso saludo y te animo a seguir luchando.
 
Maribel:

Sé perfectamente lo que sientes y te agradezco que lo compartas con todos. Personalmente viví lo que cuentas cuando trabajé en escuelas de Música y conocí estas situaciones vergonzantes que se dan en muchas de ellas.
Y creo que un problema es que aunque se cerraran todas, a un gran número de los ayuntamientos podría darles igual. Es algo con lo que en la mayoría de los casos no saben qué hacer. Los profesores no hacen una huelga en condiciones porque en una plantilla de una escuela puede haber una disparidad de intereses personales que hace imposible ponerse de acuerdo, y de unos municipios a otros la situación puede ser muy distinta.
En algunas escuelas hay profesionales serios y preocupados pero en otras hay pluriempleados, personas cercanas a los ediles puestas a dedo, en algunas puede haber incluso situaciones razonablemente buenas.....pero cuando el ayuntamiento da un palo, casi siempre va indefectiblemente a la cabeza de los mismos; los músicos de la escuela.
Nunca querría yo desanimarte, compañera, pero hace algunos años decidí que al menos de momento aquella era una guerra perdida y tomé una gran decisión; emigrar a la Secundaria. La cosa salió bien. Te diré que de los ocho que estábamos en aquella plantilla queda....uno, y es porque es el único que ha sido incapaz de salir. Lo más curioso es que teníamos contrato ¡fijo! -discontinuo- y el sueldo era más o menos el de un maestro.
Moralmente, no puedo darte un consejo, porque seguramente tú crees en lo que haces como creía yo en lo que hacía en la escuela de música. Ahora también creo en l que hago, pero tengo un respeto a mi dignidad profesional que antes nunca tuve. No obstante, hay compañeros que te dirán que n sus escuelas están bien......que les dure!
Sólo puedo desearte suerte.
Creo que las escuelas de música cuando fueron novedad en los primeros 90 tuvieron apoyo y éxito. Hoy en día son algo por lo cual los políticos no contabilizan votos de una forma visible...Si no, no me lo explico.

En fin, te repito, suerte, entereza y adelante.

Un saludo a todos.
 
Las escuelas, las buenas escuelas, no son una mala salida profesional. Debe de tenerse en cuenta que éstas en su mayoría además juegan un importante papel integador en la vida social y cultural del pueblo, lo que en ocasiones ha convertido a éstas en presuntos centros de recreo, pero tampoco se puede pretender que el nivel de dichos centros se equipare al nivel de un conservatorio porque esa no es la idea principal y ahí es donde muchos profesores se dan de bruces con la realidad: . Se nos exige ( y nos exigimos) lo mismo que a los profesores de conservatorio pero cobrando menos y trabajando más horas (muchas veces, naturalmente, sin convenios), y eso quema y mucho porque la realidad es que muy pocos alumnos de esas escuelas llegarán a profesionales porque simplemente no puedes darles la formación adecuada por falta de medios económicos. Me he manifestado reiteradas veces en este foro argumentando casi lo mismo que nuestra compañera Maribel. Una de las pocas razones por las que no he salido pitando de ellas es porque simplemente me gusta estar ahí y enseñar (debe de ser eso) y porque tampoco puedo estar en otro sitio por mi titulación. Como bien sabrá nuestra amiga Maribel, las subvenciones digamos que están pero no son. Hay que organizar grupos con un número de alumnos muy calculado, a veces hay que abrir otro curso del mismo grado, a veces hay grupos en los que prácticamente no hay alumnos y hay un exceso de alumnos que quieren cursar instrumento sólamente con la sangría económica que supone ésto y reza para que el próximo año no se matriculen más alumnos mayores de 16 años para los cuales no hay subvención. Naturalmente se debe de contratar una póliza al banco para que cuando lleguen los números rojos una vez se han pagado todos los gastos no te quedes en pelotas y puedas pagar el alquiler del piano del último concierto que organizaste y vinieron cuatro gatos. No se puede hacer música de cámara ni clases colectivas de instrumento porque no se puede pagar al profesor, etcétera, etcétera...

Hay escuelas organizadas en patronatos que tienen la inmensa suerte de contar con una situación más holgada porque el consistorio les cubre el posibé déficit del ejercicio económico anual y pueden permitirse el lujo de contar con al menos tres o cuatro formaciones estables de cámara y dos orquestas e incluso una big band, pero esas, las que menos. Donde hay que ir con cuidado es en el nivel: visto el panorama, lo más probable es que la desmotivación haga mella en el personal y como bien dice Rodolfo, los intereses de los profesores deriven hacia otros lares. Es muy muy difícil arrancar un compromiso de trabajo conjunto de un claustro de profesores de una escuela de música, en ocasiones esta falta de compromiso está rayando la indiferencia por lo que la escuela se convierte en un centro de clases particulares mientras el proyecto curricular, la metodología y los criterios de evaluación acumulan polvo en una estantería.MAribel tiene razón y quizá sea el momento de demandar soluciones.

SAlud
 
Según siempre a lo largo de los años he oído decir a gente del mundillo musical, profesores del Conservatorio, políticos municipales,etc es que el papel fundamental de las escuelas de Música no debería ser otro que el de servir de complemento, de salida alternativa a la gente que estudia en Conservatorio.Esto es, alumnado que lo único que pretende es alcanzar una formación musical básica, por pura afición, sin el objetivo claro de ser un profesional y vivir de la música para lo cual se recomienda el Conservatorio. Aquí en Avila se hizo la escuela municipalk de Música, precisamente por eso, había demasiadfas solicitudes para entrar el el Conservatorio, algunas gentes de edad ya algo pasadita para empezar a estudiar música, gentes que conseguían entrar el el Conservatorio, y que pasado un curso o dos, y veían lo duro y sacrificado de estos estudios abandonaban hundidos, pero se resistían a olvidarse por completo de la música.
Todo esto no es un obstáculo para que tanto los profesionales como algunos de los alumnos de las escuelas lleguen a ser buenos músico y enseñantes y continuen con sus aspiraciones ampliando su formación por otras vías. Aquí en Avila hay un dato que es un hecho, la gran mayoria de la matrícula procede de niños en edad escolar, en la etapa de educación infantil y primaria, cuyos padres suelen pretender "aparcar" a sus hijos un tiempo con la excusa de darles educación musical, lo ven como una actividad extraerscolar de sus respectivos colegios, pues los padres que de verdad se toman en serio lo de la música intentan la vía del conservatorio, que además es enseñanza gratuita.l
 
"La Escuela de Música tiene la finalidad de contribuir al desarrollo musical del entorno en el que está ubicada y de despertar el interés profesional de los alumnos y alumnas que en un momento posterior puedan pasar a una enseñanza en un Conservatorio. Con la enseñanza musical impartida en la escuela de música se quiere contribuir a una formación integral de la persona individual y socialmente, desarrollando el potencial expresivo y comunicativo de estos estudios que no sólo conducen a la adquisición de habilidades técnicas sino también a desarrollar la sensibilidad por los diferentes aspectos del mundo musical.
Una escuela de Música puede ofrecer enseñanza no reglada, y en este caso no conducirá a obtener títulos de validez académica o profesional, aunque por el contrario, estos centros musicales también podrían ofrecer enseñanza reglada, para que los alumnos puedan acceder a los Conservatorios Profesionales."

Las Escuelas de Música dan cultura musical a la población, de todos sus alumnos unos pocos serán músicos profesionales, pero todos los demás recibirán una educación musical, que enriquecerá sus vidas, y serán el público que asistirá a los conciertos de esos profesionales.

Un saludo
 
Muy bien reflejado todo, mi entrañable Maribel. Viene a corroborar lo que comenté anteriormente. Sin lugar a dudas yo soy de los que piensa que las Escuelas de Música son muy necesarias por el bien social que hacen y debería haber muchas más, porque no en todos los sitios hay un Conservatorio, pero seguro que grandes profesores hay muchos más , en Conservatorios, institutos, Colegios y por supuesto en las Escuelas de Música.
Más saludos. :baile:
 
En primer lugar decir que yo soy un gran defensor de las escuelas de música puesto que soy profesor de guitarra en dos de ellas. Pero tendría que aportar algún dato más. Soy defensor de las escuelas de música bien organizadas, esto es, casi ninguna.
Desgraciadamente en mi corto andar profesional, he observado como las escuelas son solo una tapadera gubernamental y burocrática para ahorrar dinero.
No vamos a negar el dinero que le cuesta a la junta pagar a un profesor de un conservatorio elemental para que trabaje 18 ò 20 horas como mucho, mientras que un ayuntamiento paga 300 ó 400€ a un profesor que trabaja 35 horas. Es de vergüenza. Y esto último si consigues la jornada completa en una escuela, lo cual es casi imposible, si no es así, además te toca viajar a los pueblos cercanos para ganarte un sueldo medio digno.
Otra cosa indignante en las escuelas de música es el menosprecio que se nos tiene a los profesores por parte de otros compañeros del medio, poniendo muchas veces en duda nuestra propia profesionalidad. El tema en este aspecto está bastante calentito en Castilla la Mancha con el previsible cierre de los conservatorios elementales.
Las escuelas de música ofrecen un abanico enorme de posibilidades mucho mayor que el que ofrecen los conservatorios, lo que pasa comunmente es que normalmente los ayuntamientos solo tienen escuelas para cumplir y lavar un poco su imagen y con pocos medios económicos, pocas infraestructuras, muchos alumnos en clase...y todas esas cosas que nos ha recordado Maribel, a veces es complicado ofrecer una enseñanza de calidad.
 
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